EL SER HUMANO…EN REALIDAD TODO UN MISTERIO

febrero 18, 2009

Aunque en ocasiones ignoremos la importancia que tiene todo el medio que nos rodea a nosotros mismos (situaciones cotidianas, formas de pensar…), con forme va pasando el tiempo nos vamos dando cuenta y cada vez más de que el ser humano es un ser frágil y difícil de comprender.

Precioso y quebradizo, valioso y vulnerable, admirable y frágil es el ser humano.

-Una característica que modifica tanto a lo maravilloso como a lo vulnerable: el ser humano puede percatarse de cómo está elaborada una ánfora, necesita interpretar los relatos que la forman y debe cuidar de su fragilidad para que no se rompa.

Poder, necesidad y deber sugieren una antropología de la fragilidad,

 

 

 

 

¿…?

“¿Quién soy yo?”. Soy enigma para mí mismo. Con razón se ha llamado

al ser humano animal hermenéutico, intérprete de sí mismo.

Entre la gama de interpretaciones elijo aquí la que caracteriza lo

humano por su fragilidad; el homo sapiens, especie vulnerable, está

pidiendo una antropología de la fragilidad. Una filosofía de lo humano

terapéutica y dialogante: diagnóstico y diálogo al servicio de la

humanización de la humanidad. Como herederos de una tradición

de racionalidad, nos vemos obligados a cuestionarla desde una

humanidad perpleja ante la propia capacidad de autodestrucción e

incomunicación. “Especie vulnerable”: así es el ser humano, capaz de

destruirse a sí mismo, a sus congéneres y a su entorno. Urge diagnosticar

sus enmascaramientos y curar sus heridas. Después de haber

visto en el siglo XX y en el mismo comienzo del XXI tantas guerras,

justificadas en nombre de una falsa racionalidad, ya no podemos

construir una antropología centrada con excesivo optimismo en la

definición del ser humano como animal que razona. Pero tampoco

podemos renunciar al esfuerzo por sacar de su engaño a este ser tan

enigmático. Al menos, habrá que seguir preguntando por su misterio

y buscando su liberación.

La filosofía del ser humano plantea preguntas, sin respuesta plena,

en torno a las incertidumbres radicales de esta especie animal que

somos los humanos: no sabemos quiénes somos, pero seguimos preguntando.

Como decía Agustín, nos hemos convertido en cuestión

para nosotros mismos.

 

 

Tras buscar y buscar información sobre la fragilidad del ser humano, encontré este pequeño fragmento de un texto comencé a leerlo y la verdad es que me sorprendió a la vez que me llamó la atención, pues, me parece interesante y m atrae la forma con la cual esta escrito.

 

 

 

 

*En mi opinión cada ser humano es un mundo, pues nadie puede ser como otra persona por mucho que lo intente ya que, no se cambia del día a la mañana, cada uno tiene su forma de ser, sus creencias…y esto es una cosa con la cual hay que vivir toda la vida. También es verdad que en ocasiones las apariencias engañan y no todo es lo que parece, por eso hay que tener cuidado y pensar las cosas para no llegar a llegarte un desengaño…

Deja un comentario